Las adicciones en los seres humanos son múltiples, algunas de ellas socialmente aceptadas como el alcohol, tabaquismo y otras que resultan muy extrañas que van desde comer cosas insólitas, hasta estar sentado muchas horas en un ordenador o cualquier otro aparato moderno que nos quita mucho tiempo y nos hace descuidar otras labores lo que a la larga nos hace sentir una sobrecarga y sentido de culpa, las adicciones a las redes sociales Facebook, Twitter, son otras adicciones en los tiempos que corren, muchas personas comen encima del ordenador y pasan horas y horas en el, las relaciones personales se van perdiendo ya que se vive sumergido en este mundo virtual,quien no ha visto en metros, sitios de reuniones, como una gran mayoría de personas solo esta pendiente de su celular y no presta atención a lo que lo rodea, en mayor o menor medida todos tenemos algún tipo de adicción que aceptemos que la tenemos o no, nos condiciona una gran parte de nuestra vida.
Entre las adicciones mas extrañas que encontré por la red fue la de comer cosas tan insólitas como plástico, pelos de gato, jabones, pinturas de uñas, gasolina, desodorantes, que son perjudiciales a la salud y sin embargo las consumen como golosinas,
Una rara adicción que tiene Keyschia una mujer de Nueva York es la de oler y comer pañales usados, cuando cocina, duerme y hasta para salir necesita tener uno siempre a la mano, una muy extraña adicción la de esta chica.
Tempestt Herdenson una chica de 19 años es adicta al jabón, se come 5 barras de este producto a la semana, y dice que es una sensación angelical cuando se come la barra de jabón, y recuerda que comenzó a comerlo cuando termino la relación con su novio debido a la ansiedad que sentía y desde esa fecha no para de comerse las barras de jabón.
Otra adicción sorprendente es la de comer desodorantes que tiene Nicole, y que trae serios problemas de salud, a esta joven le encanta comer desodorantes unos 15 barras por mes, ella comenta que si no se los come comienza a tener dolores de cabeza y mucha ansiedad y a pesar que sabe el daño que provocan a su salud no puede parar de consumirlos.
Tomar gasolina como si fuese una bebida refrescante, así lo hace Shanon, le encanta la sensación de quemadura que le produce este liquido al pasar por su garganta, se toma 12 cucharaditas diarias a pesar que sabe el riesgo por ingerirlo no puede parar de tomarla.
Comer piedras adicción muy asombrosa que tiene Teresa, si no come al menos una piedra diaria no puede estar tranquila y lo a hecho por mas de 20 años, le encanta su olor, su textura y su sabor el crujir sobre sus dientes como maní es una sensación muy placentera para Teresa, le encanta el granito el cual tritura con un martillo, se come un kilo de piedras al día las carga siempre con ella para comerlas cuando le apetezca, este tipo de dependencia le ha ocasionado ya problemas como deterioro de sus dientes, problemas estomacales, atragantamientos, a pesar de todo esto ella no cree que pueda parar de comer piedras.
Adicta a las ratas, estos animales que a la gran mayoría les ocasiona repulsión y temor, para una mujer de Arizona Theresa, son como tiernas mascotas tiene unas 52 ratas calvas y todas tienen su nombre, le fascina estos roedores sin pelos y comenta que son su familia y le brindan un amor incondicional.
Me ha encantado conocer adicciones, siempre se aprende de ellas... Muy interesante, Maritza. Un abrazo.
ResponderBorrarGracias Julie por tu comentario, si son miles de adicciones extrañas que tenemos los seres humanos, algunas muy sorprendentes.
ResponderBorrarAbrazo
Surprising set of photos :))
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